El Ayuntamiento está instalando 54 dispensadores de ceniceros ecológicos en los accesos a playas, los parques Nagüeles, Vigil de Quiñones y Arroyo de la Represa y los polideportivos Antonio Serrano Lima y Paco Cantos de la ciudad.

La iniciativa ha sido presentada esta mañana por los delegados de Medio Ambiente y Deportes, Antonio Espada y Federico Vallés, junto al responsable de la empresa que gestiona y distribuye los ceniceros, Víctor Ramos. Espada ha señalado que “el objetivo es que, tanto los residentes como los turistas, tomen conciencia del impacto medioambiental de las colillas y utilicen estos utensilios ecológicos para depositarlas”.

Ha precisado que “los dispensadores se han colocado en los lugares en los que los ciudadanos fuman más, ya que desde que entró en vigor la ‘Ley Antitabaco’ es mucho más común que se fume en espacios abiertos al no estar permitido en oficinas y lugares públicos” y ha especificado que la actuación “tendrá coste cero para el Ayuntamiento”.

El edil ha señalado que “cada año millones de colillas acaban tiradas en el suelo y no son residuos biodegradables, por lo que acumulan elementos tóxicos que suponen un riego para la fauna” y ha añadido que “además de ensuciar nuestras calles, lo más preocupante es que, generalmente, la lluvia las arrastra hasta cursos fluviales, llegando a costas y campos, y pueden pasar hasta 10 años para que se descompongan”.

Por su parte, Federico Vallés, ha valorado la iniciativa asegurando que “en un municipio turístico como Marbella en el que la imagen es tan importante es muy positivo que se ponga en marcha una actuación que va a contribuir a mejorar la limpieza y que, sin duda, tiene un gran valor desde el punto de vista medioambiental”.

Víctor Ramos ha indicado que la iniciativa también se está desarrollando en las Rías Baixas, en Málaga capital y en las ciudades de la costa desde Nerja hasta Rincón de la Victoria y ha destacado que “era importante ponerla en marcha en Marbella al ser un emblema del turismo internacional”.