El concejal del ramo, Manuel Cardeña, ha explicado que ante la inminente entrada de la TDT en la ciudad, previsto para el mes de enero, el Ayuntamiento “es consciente de las dificultades que supondrá la adaptación al apagón analógico para determinados colectivos”, entre ellos, las personas con una discapacidad sensorial igual o superior al 33 por ciento, las que tengan 65 años o más con una gran dependencia o severa, y los mayores de 80 años que vivan solos o en compañía de otra persona que supere también esa edad.

En este sentido, la delegación municipal de Bienestar Social intermediará con la Jefatura Provincial de Inspección de Telecomunicaciones de Málaga para que las personas con discapacidades obtengan un descodificador TDT.

Para ello y con el fin de evitar el inconveniente que supone su traslado a las oficinas e la Jefatura Provincial de Inspección de Telecomunicaciones de Málaga para realizar la tramitación administrativa, el Ayuntamiento “ejercerá de interlocutor para facilitar la gestión administrativa y difundir esta medida entre los colectivos interesados”.

La concejalía, al respecto, facilitará a los colectivos beneficiarios la documentación requerida, colaborando en su cumplimentación y tramitación ante la Jefatura Provincial.