El Ayuntamiento ha puesto en marcha un operativo especial de poda y saneamiento del arbolado público aprovechando el otoño. Además de sanearlo, se pretende prevenir las molestias que ocasionan a los vecinos ramas secas y los árboles demasiado crecidos.

El plan se aplica tanto en San Pedro como en Marbella, donde trabajan sendas cuadrillas especiales acompañadas de camiones equipados con cestas elevadoras. Junto a esas brigadas municipales, hay otra encargada exclusivamente de la poda de palmeras que empieza esta semana a trabajar en San Pedro Alcántara, así como una empresa privada que fue contratada para reforzar la poda de yucas y palmeras.

“Los árboles que viven en ciudades  compiten al nivel de su copa y subterráneamente con cables, tuberías, hormigón, que sin duda afectan a su desarrollo. Por eso la poda, además de prevenir enfermedades vegetales, previene desprendimientos de ramas secas por el viento, por ejemplo, o evita las molestias a los vecinos cuando las ramas han crecido tanto que chocan con sus ventanas, tapan señales de tráfico, semáforos o cables”, comenta Pablo Moro, concejal delegado de Servicios Operativos.

En líneas generales se están eliminando ramas secas, dañadas, enfermas, los brotes nuevos que nacen de las raíces o ramas mal dispuestas (con crecimientos en ángulo). También se está efectuando una poda sanitaria, de extracción de todo material vegetal muerto o dañino para la planta, lo que incluye también el aclareo o poda de ramas excesivas para favorecer la entrada de aire y sol, además de la reducción de la copa. Desde el Ayuntamiento se consideran estas labores muy útiles para mantener en buen estado los árboles, así como para incentivar la floración posterior en primavera.

Por otra parte, este operativo contribuirá a identificar ejemplares que requieren podas extraordinarias, ante una plaga o enfermedad, por una mala elección de la especie, o crecimiento excesivo para el sitio en que se encuentra plantado. Es el caso del arbolado de zonas como la calle Trapiche, Alonso Bazán o Notario Luis Oliver, entre otras, donde los árboles presentan muy mal estado y deben ser sustituidos paulatinamente por ejemplares sanos.

Con respecto a las palmeras afectadas por el picudo rojo que han debido ser taladas, el Ayuntamiento está eliminando los tocones y plantando en su lugar árboles adecuados.

Según Moro, “Marbella tiene la gran ventaja de contar con una masa arbórea importantísima, ya que tenemos registrados 60.000 árboles públicos. Pero esa ventaja también implica muchísimo esfuerzo para mantener en óptimo estado la ciudad”.