Romero ha precisado que esta normativa se aplicará a los edificios de nueva construcción y a aquellos locales comerciales e inmuebles que quieran hacer alguna obra menor o modificación en sus fachadas.
“El centro ha crecido sin orden en cuanto a colores y elementos que deben estar regulados”, ha subrayado el portavoz, quien ha explicado que la modificación que se llevó a cabo a finales de 2006 en este ámbito “tampoco tuvo en cuenta aspectos estéticos que son fundamentales para preservar el espíritu de un área singular”.
La propuesta regula el uso de colores en las fachadas de los edificios siguiendo la estructura de ‘pueblo andaluz’, que prima el blanco o la gama de los ocres y añiles suaves y claros y prohíbe los que tengan acabados brillantes o metálicos. Tampoco se podrán utilizar materiales decorativos que sustituyan a la pintura en acabados en piedra, como el mármol o granito.
Se regulan también aspectos relacionados con los bajantes, canalones, balcones e instalaciones como la de aire acondicionado que, a partir de ahora, no podrán colocarse en las fachadas que dan a la vía pública sino en la cubierta de las edificaciones o patios interiores.
En otro orden de cosas, la Junta de Gobierno Local ha dado cuenta hoy de otros proyectos, como el de mejora de la eficiencia energética del alumbrado público y la movilidad peatonal en la avenida del Mar por un importe de 130.800 euros; la adecuación de las instalaciones deportivas municipales junto al CEIP Nueva Andalucía, cuyo montante asciende a 165.000 euros, y la contratación de las obras para la remodelación de las pistas polideportivas en la zona de Las Albarizas por un total 68.500 euros.
Romero ha apuntado que estas actuaciones “evidencian la firme apuesta del Equipo de Gobierno por la mejora de los equipamientos deportivos, subsanando las deficiencias que arrastraban por la dejadez de las corporaciones anteriores”